Verano de vacaciones, ¡y de huracanes también!
Todos los años tenemos que estar preparados para esta temporada, que es entre el 1ro de junio y el 30 de noviembre de cada año.
La historia de los huracanes se remonta hacia antes del descubrimiento. Los taínos (tribu indígena de Puerto Rico) llamaman al dios del mal "Juracán", quien era para ellos es "Dios del caos y el desorden; se cree que causan el caos a través del tiempo, especialmente a través de los huracanes.[1]" La palabra huracán en español, se deriva del término original taíno.
¡PEROO! Hay un detalle que siempre sucede...
Siempre que anuncian el huracán, lo anuncian de manera exagerada. Los medios de televisión y radio lo avisan, y la vez "asustan". Y se repite, se repite, se repite... al punto que asusta a mucha gente (y me atrevo decir que a la mayoría). Y siguen con lo mismo durante el día, se pone la gente mucho más histérica. Suenan los teléfonos, celulares y mensajes de textos entre familiares: "¿Estás bien?....¿Y los niños?..."Voy a supermercado ahora"..."¡#@R@H@, en qué clase de tapón me he metido!!!", sólo son algunas de las frases "histéricas" que viajan a través de los "hilos" comunicativos.
Entonces la gente salen de la "gatera" como carrera de caballos para llegar a las tiendas a comprar cosas al grado que las terminan tan rápido, que las demás personas que entraron con ellos mismo no alcanzan de la mercancía que buscaban. Luego van a sus casas para proteger la misma y protegerse a ellos mismos.
Y luego de eso, sigue el gobierno: "Ya estamos en vigilancia...", "Las agencias de emergencia están llevando a cabo estos procesos...", "El huracán nos puede impactar, por lo que levaremos a cabo lo siguiente..", y BLA, BLA, BLA... Siempre lo mismo, nada nuevo.
Pero nada. Los fenómenos atmosféricos y terrestres son parte de la vida. Nunca nos podremos desatar de ellos. No quiere huracán, se muda a California y verá terremotos, en los estados del centro y hacia el este, tornados. Tormentas de invierno, maremotos, y con el calentamiento global cualquier cosa puede suceder.
Pero nada. Después que anuncian el huracán y tomo las medidas necesarias, simplemente espero a que corten los servicios (casi siempre con horas antes), y me relajo para esperar el huracán; Aunque el huracán sea categoría tres, evito las histeria de categoría 10. Tómenlo con calma y con mucha precaución.
[1] Fuente: Diccionario taíno:
http://www.seepuertorico.com/es/diccionario-taíno#J
Y luego de eso, sigue el gobierno: "Ya estamos en vigilancia...", "Las agencias de emergencia están llevando a cabo estos procesos...", "El huracán nos puede impactar, por lo que levaremos a cabo lo siguiente..", y BLA, BLA, BLA... Siempre lo mismo, nada nuevo.
Pero nada. Los fenómenos atmosféricos y terrestres son parte de la vida. Nunca nos podremos desatar de ellos. No quiere huracán, se muda a California y verá terremotos, en los estados del centro y hacia el este, tornados. Tormentas de invierno, maremotos, y con el calentamiento global cualquier cosa puede suceder.
Pero nada. Después que anuncian el huracán y tomo las medidas necesarias, simplemente espero a que corten los servicios (casi siempre con horas antes), y me relajo para esperar el huracán; Aunque el huracán sea categoría tres, evito las histeria de categoría 10. Tómenlo con calma y con mucha precaución.
[1] Fuente: Diccionario taíno:
http://www.seepuertorico.com/es/diccionario-taíno#J
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